Turmalina Negra: Está asociada a la protección energética (evita que la negatividad te afecte). Al trabajar, evita la negatividad y favorece el buen humor. Libera tensiones.
*IMÁGENES REFERENCIALES: Forma y color de la piedra puede cambiar según cada modelo.
Piedra Luna: La piedra de los nuevos comienzos. Alivia el estrés emocional y favorece un buen funcionamiento de los órganos reproductores femeninos. Además, es muy buena para las personas inquietas y se le asocia a todo tipo de amor.
Labradorita: Es una piedra de alta vibración espiritual y protectora. Suele disipar miedos e inseguridades. Fortalece la fe en nosotros mismos, calma la mente hiperactiva y activa la imaginación. A nivel físico, se dice que ayuda con la artritis, reumatismo o resfriados. Además, alivia el estrés y equilibra las hormonas.
Citrino: Representante del rayo dorado del sol. Favorece los ingresos monetarios y el éxito en los negocios. Se le asocia a la prosperidad en el trabajo, claridad de pensamiento, ideas brillantes y energías positivas. Ayuda a sintonizar con maestros de luz y sus enseñanzas. Es símbolo de sabiduría, confianza y armonía
Labradorita: Es una piedra de alta vibración espiritual y protectora. Suele disipar miedos e inseguridades. Fortalece la fe en nosotros mismos, calma la mente hiperactiva y activa la imaginación. A nivel físico, se dice que ayuda con la artritis, reumatismo o resfriados. Además, alivia el estrés y equilibra las hormonas.
Pirita: Asociada a activar las energías que nos encausan hacia un pensamiento de prosperidad. Su energía positiva trabaja la mentalidad de escasez, ayudando a pensar fuera del standard y así buscar mejores oportunidades. Es ideal para ser usada en el trabajo, estudios o diversos proyectos.
Amatista: Conocido como el cristal de la espiritualidad. Ayuda al equilibrio emocional y abre los canales que conducen a la sabiduría. Es un transmutador de emociones, pues transforma las energías negativas de distintas situaciones o actitudes. Además, favorece la conexión mente-pensamiento.
Rodocrosita: Piedra que representa el amor desinteresado y la compasión. Además, imparte una actitud dinámica y positiva; es excelente para el corazón, enseñándole a asimilar los sentimientos dolorosos.
White Topaz: Mejora la claridad en el pensamiento, ayuda a equilibrarnos emocionalmente y atraer la tranquilidad a nuestras vidas
Ágata rosa: Piedra semipreciosa conocida por su belleza y propiedades curativas, promoviendo el amor propio, la autoestima y la armonía emocional. Se cree que su energía suave y calmante puede ayudar a aliviar el estrés, fomentar la compasión y fortalecer las relaciones personales.
Cuarzo Rosa: Trabaja sobre las energías asociadas al amor incondicional hacia otros seres y sobretodo hacia nosotros mismos. Además, atrae sensaciones de paz y ayuda a conciliar el sueño.
Amatista: Conocido como el cristal de la espiritualidad. Ayuda al equilibrio emocional y abre los canales que conducen a la sabiduría. Es un transmutador de emociones, pues transforma las energías negativas de distintas situaciones o actitudes. Además, favorece la conexión mente-pensamiento.
Cuarzo Verde: Transmite sensación de bienestar, atrae la salud a tu vida. Equilibra las energías masculinas y femeninas que rigen en el interior. Brinda serenidad y paciencia.
Ayuda a canalizar energía como la pasión, el amor y la energía vital. Nos brinda protección contra las fuerzas negativas y estimula el chakra que fortalece la conexión con la tierra.
Labradorita: Es una piedra de alta vibración espiritual y protectora. Suele disipar miedos e inseguridades. Fortalece la fe en nosotros mismos, calma la mente hiperactiva y activa la imaginación. A nivel físico, se dice que ayuda con la artritis, reumatismo o resfriados. Además, alivia el estrés y equilibra las hormonas.
Topacio blanco: Tiene propiedades protectoras como curación, poder y positividad. Se sabe que el topacio induce felicidad y provoca sentimientos de espiritualidad. Nos ayuda a manifestar, a aclarar nuestros pensamientos y en nuestro desarrollo espiritual.