Larimar: Ayuda a verbalizar los sentimientos, por lo que se le considera la piedra de la paz y el perdón. Armoniza todo el organismo y es apropiada para el sistema nervioso. Trabaja regulando las energías asociadas a la ansiedad. Aporta fortaleza al sistema inmune y aumenta las defensas.
Amatista: Conocido como el cristal de la espiritualidad. Ayuda al equilibrio emocional y abre los canales que conducen a la sabiduría. Es un transmutador de emociones, pues transforma las energías negativas de distintas situaciones o actitudes. Además, favorece la conexión mente-pensamiento.
Onix: Neutraliza cualquier energía negativa que tengamos dentro o que llegue a nosotros. Limpiar la propia aura y suele ser utilizada para enfrentarse a situaciones difíciles. Imparte autoconfianza y ayuda a estar en armonía con tu entorno.
Ónix: Neutraliza cualquier energía negativa que tengamos dentro o que llegue a nosotros. Limpiar la propia aura y suele ser utilizada para enfrentarse a situaciones difíciles. Imparte autoconfianza y ayuda a estar en armonía con tu entorno
Topacio: Es considerada como la piedra asociada a la abundancia, por lo que está asociada al tercer chakra. Permite incrementar tu propio conocimiento, así como también genera confianza y seguridad en ti mismo.
Amatista: Conocido como el cristal de la espiritualidad. Ayuda al equilibrio emocional y abre los canales que conducen a la sabiduría. Es un transmutador de emociones, pues transforma las energías negativas de distintas situaciones o actitudes. Además, favorece la conexión mente-pensamiento.
Cuarzo Rosa: Trabaja sobre las energías asociadas al amor incondicional hacia otros seres y sobretodo hacia nosotros mismos. Además, atrae sensaciones de paz y ayuda a conciliar el sueño.
Pirita: Asociada a activar las energías que nos encausan hacia un pensamiento de prosperidad. Su energía positiva trabaja la mentalidad de escasez, ayudando a pensar fuera del standard y así buscar mejores oportunidades. Es ideal para ser usada en el trabajo, estudios o diversos proyectos.
Amatista: El cristal de la espiritualidad. Ayuda al equilibrio emocional y abre los canales que conducen a la sabiduría. Es un transmutador de emociones, pues transforma las energías negativas de distintas situaciones o actitudes. Además, favorece la conexión mente-pensamiento.
Cuarzo Rosa: Trabaja sobre las energías asociadas al amor incondicional hacia otros seres y sobretodo hacia nosotros mismos. Además, atrae sensaciones de paz y ayuda a conciliar el sueño.
Cuarzo Rosa: Trabaja sobre las energías asociadas al amor incondicional hacia otros seres, y sobre todo hacia nosotros mismos. Además de ser protector, nos permite conciliar el perdón y propicia la reconciliación. Incluso, al ser colocado debajo de la almohada, ayuda a conciliar el sueño y así descansar mejor.